Propiedad asociativa - Qué es, ejemplos, definición y concepto

Propiedad asociativa Qué es, ejemplos, definición y concepto

La propiedad asociativa es una de las reglas fundamentales de las operaciones matemáticas que asegura que el orden en el que agrupamos los números no afecta el resultado de ciertas operaciones. Es esencial en las matemáticas porque simplifica los cálculos y nos permite reorganizar los términos sin cambiar el resultado final. Esta propiedad es aplicable en las sumas y multiplicaciones, pero no se aplica de la misma manera en las restas ni en las divisiones. Vamos a profundizar en qué significa, cómo se aplica y cómo podemos usarla en diversos ejemplos.

Tabla de Contenido
  1. La propiedad asociativa en la suma
  2. El caso de las multiplicaciones
  3. Resta y propiedad asociativa
  4. La división
  5. Ejemplos de propiedad asociativa
    1. Ejemplo 1: Suma
    2. Ejemplo 2: Multiplicación
    3. Ejemplo 3: Resta
    4. Ejemplo 4: División

La propiedad asociativa en la suma

La propiedad asociativa de la suma establece que, al sumar tres o más números, el resultado será el mismo sin importar cómo se agrupan los números. Es decir, si tenemos tres números aaa, bbb y ccc, la propiedad nos dice que:(a+b)+c=a+(b+c)(a + b) + c = a + (b + c)(a+b)+c=a+(b+c)

Esto significa que no importa si agrupamos primero aaa con bbb, o bbb con ccc; el resultado final será siempre el mismo. Por ejemplo:(3+4)+5=3+(4+5)(3 + 4) + 5 = 3 + (4 + 5)(3+4)+5=3+(4+5) 7+5=3+97 + 5 = 3 + 97+5=3+9 12=1212 = 1212=12

Como podemos ver, el orden de los agrupamientos no afecta el resultado final.

El caso de las multiplicaciones

Al igual que con la suma, la propiedad asociativa también se aplica en las multiplicaciones. Si tenemos tres números aaa, bbb y ccc, la propiedad nos asegura que:(a×b)×c=a×(b×c)(a \times b) \times c = a \times (b \times c)(a×b)×c=a×(b×c)

Esto significa que podemos agrupar los números de cualquier forma y el resultado será el mismo. Por ejemplo:(2×3)×4=2×(3×4)(2 \times 3) \times 4 = 2 \times (3 \times 4)(2×3)×4=2×(3×4) 6×4=2×126 \times 4 = 2 \times 126×4=2×12 24=2424 = 2424=24

Al igual que con la suma, la agrupación de los números no cambia el resultado.

Resta y propiedad asociativa

A diferencia de la suma y la multiplicación, la propiedad asociativa no se aplica en la resta. Esto se debe a que el orden de los números sí afecta el resultado. Si intentamos agrupar de distintas formas, obtendremos resultados diferentes. Por ejemplo:(10−5)−2≠10−(5−2)(10 - 5) - 2 \neq 10 - (5 - 2)(10−5)−2=10−(5−2) 5−2=3y10−3=75 - 2 = 3 \quad \text{y} \quad 10 - 3 = 75−2=3y10−3=7 (10−5)−2=3−2=1(10 - 5) - 2 = 3 - 2 = 1(10−5)−2=3−2=1

Como podemos ver, los resultados no coinciden. El orden de las operaciones sí importa en la resta, por lo que no existe una propiedad asociativa en este caso.

La división

Al igual que en la resta, la división no cumple con la propiedad asociativa. En este caso, el orden de los números sí influye en el resultado. Si agrupamos de distintas formas, el resultado cambiará. Por ejemplo:(12÷4)÷3≠12÷(4÷3)(12 \div 4) \div 3 \neq 12 \div (4 \div 3)(12÷4)÷3=12÷(4÷3) 3÷3=1y12÷1=123 \div 3 = 1 \quad \text{y} \quad 12 \div 1 = 123÷3=1y12÷1=12 (12÷4)÷3=3÷3=1(12 \div 4) \div 3 = 3 \div 3 = 1(12÷4)÷3=3÷3=1

En este caso, el resultado cambia dependiendo de cómo agrupemos las operaciones. La división no es asociativa, lo que significa que no podemos reorganizar los términos sin que el resultado cambie.

Ejemplos de propiedad asociativa

Ejemplo 1: Suma

Imaginemos que tenemos los números 7, 3 y 5. Aplicando la propiedad asociativa en la suma:(7+3)+5=7+(3+5)(7 + 3) + 5 = 7 + (3 + 5)(7+3)+5=7+(3+5) 10+5=7+810 + 5 = 7 + 810+5=7+8 15=1515 = 1515=15

Como podemos ver, el resultado es el mismo independientemente de cómo agrupemos los números.

Ejemplo 2: Multiplicación

Ahora, tomemos los números 2, 4 y 6. Aplicando la propiedad asociativa en la multiplicación:(2×4)×6=2×(4×6)(2 \times 4) \times 6 = 2 \times (4 \times 6)(2×4)×6=2×(4×6) 8×6=2×248 \times 6 = 2 \times 248×6=2×24 48=4848 = 4848=48

De nuevo, el resultado es el mismo sin importar el agrupamiento de los números.

Ejemplo 3: Resta

Consideremos los números 10, 3 y 2. Al intentar aplicar la propiedad asociativa en la resta, observamos que los resultados no son iguales:(10−3)−2=10−(3−2)(10 - 3) - 2 = 10 - (3 - 2)(10−3)−2=10−(3−2) 7−2=10−17 - 2 = 10 - 17−2=10−1 5=95 = 95=9

Esto demuestra que la propiedad asociativa no funciona en la resta.

Ejemplo 4: División

Tomemos los números 12, 6 y 2. Al intentar aplicar la propiedad asociativa en la división:(12÷6)÷2=12÷(6÷2)(12 \div 6) \div 2 = 12 \div (6 \div 2)(12÷6)÷2=12÷(6÷2) 2÷2=12÷32 \div 2 = 12 \div 32÷2=12÷3 1=41 = 41=4

Como podemos ver, el resultado cambia dependiendo de cómo agrupemos los números, lo que demuestra que la división tampoco es asociativa.


En resumen, la propiedad asociativa es un concepto muy útil en las matemáticas, pero solo se aplica a la suma y la multiplicación. En la resta y la división, el orden de las operaciones sí importa y, por lo tanto, no podemos aplicar esta propiedad. Comprender cómo funciona esta propiedad nos ayuda a realizar cálculos de manera más eficiente y nos proporciona una base sólida para operaciones matemáticas más complejas.

¿Te ha resultado útil este post?
Interesante:  Calculadora
Subir