¿Qué es un servidor cloud?

Un servidor cloud es una infraestructura virtual que proporciona recursos de computación a través de internet. A diferencia de los servidores físicos tradicionales, los servidores cloud utilizan tecnologías de virtualización para dividir y distribuir recursos de hardware en múltiples servidores virtuales.

Estos servidores permiten a los usuarios alojar aplicaciones, almacenar datos y ejecutar tareas sin necesidad de gestionar hardware físico. Ofrecen flexibilidad, escalabilidad y costos más bajos, ya que los recursos pueden ajustarse según la demanda. Además, los servidores cloud suelen ser gestionados por proveedores de servicios que garantizan su mantenimiento, seguridad y disponibilidad.

Características principales de los servidores cloud

• Infraestructura informática que puede ser física (bare metal), virtual o una combinación de ambas, según el caso de uso.
• Ofrece todas las capacidades de un servidor local.
• Permite a los usuarios manejar grandes cargas de trabajo y almacenar volúmenes significativos de datos.
• Proporciona servicios automatizados bajo demanda a través de una API.
• Ofrece opciones de pago mensual o según el uso.
• Los usuarios pueden elegir un plan de alojamiento compartido que se ajusta según las necesidades.

¿Por qué optar por servidores en la nube?

Rentabilidad

Con los servidores en la nube, las organizaciones solo pagan por los recursos que utilizan, lo que reduce los costos asociados al mantenimiento del hardware del servidor.

Escalabilidad

Los usuarios pueden ajustar los recursos de computación y almacenamiento según las necesidades cambiantes. Esto es particularmente útil para organizaciones con demandas variables.

Integración

Los servidores en la nube de una organización están interconectados para asegurar una comunicación continua y un despliegue rápido. Un "panel único" facilita el control total.

Consideraciones

Comparación entre servidores virtuales y físicos: Los servidores físicos (bare metal) son ideales para cargas de trabajo que manejan grandes volúmenes de datos. Por otro lado, los servidores virtuales son más adecuados para cargas de trabajo muy variables.

Virtualización: Los servidores en la nube pueden ser físicos o virtuales. Entre las opciones de software de virtualización se encuentran VMware, Parallels y Hyper-V. (Consulte el video siguiente para obtener más información sobre virtualización).

Personalización: Los servidores físicos ofrecen numerosas opciones de personalización, como mayor potencia de procesamiento, RAM adicional y alimentación de reserva.

Seguridad: Las opciones de seguridad para servidores en la nube incluyen cortafuegos, software antivirus, monitoreo y protección contra intrusiones en el host.

Costo frente a tecnología frente a proveedor

He sido testigo o parte de las decisiones de compra de servidores de miles de clientes, desde propietarios de pequeñas empresas que están lanzando su primer sitio web hasta plataformas consolidadas con millones de visitas diarias. Aunque cada uno de estos perfiles tenía diferentes necesidades y prioridades para un servidor en la nube, todos compartían varios factores clave al tomar su decisión:

¿Cuál será el costo? ¿Cuál es la mejor configuración/tecnología? ¿Qué proveedor es más confiable?

Todo administrador de sitios web ha tenido que abordar estas tres preguntas. Aunque parecen claras y directas, tienden a solaparse y la decisión de compra se complica:

La suposición lógica es que todos optarían por un servidor en la nube que se sitúe en la "zona óptima" donde se superponen los tres círculos, pero las decisiones de servidores no se toman a la ligera. Las decisiones de alojamiento completamente válidas deben considerar todos los puntos de dicho gráfico.

Desglosemos el gráfico en diferentes zonas para analizar por qué un usuario elegiría un servidor en cada área:

Zona 1:  el presupuesto es la prioridad principal, nosotros solemos recomendar, para ahorrarte tiempo en búsqueda, los que ofrecen servidores.cloud.

Zona 2:  los administradores de TI de grandes empresas que tienen servidores en local o clientes leales que no desean cambiar de proveedores.

Zona 3:  compradores que necesitan la infraestructura más rápida, potente y escalable disponible.

Zona 4:  clientes que son fieles a un proveedor, siempre y cuando esa lealtad no exceda su presupuesto.

Zona 5:  usuarios a quienes les gusta tener la última tecnología y valoran poder gestionarla a través de un proveedor.

Zona 6:  elegirán el entorno en la nube que ofrezca el mejor rendimiento dentro de su presupuesto, sin importar el proveedor.

Zona 7:  compradores que valoran igualmente las tres prioridades y pueden optar por un entorno que satisfaga todas sus necesidades.

Pueden producirse muchos cambios entre una decisión de compra inicial y una decisión de seguimiento.

Independientemente de cómo se tome una decisión de compra inicial, cuando llegue el momento de cambiar de servidor en la nube, siempre aparecerá un nuevo factor a considerar: probablemente querrá crecer en el mismo lugar.

Cambiar de proveedor puede resultar incómodo, gestionar entornos entre varios proveedores es más complicado y, si los servidores deben trabajar juntos, normalmente lo harán a través del Internet público, lo que puede no ofrecer el mejor rendimiento.

Si tuviera que elegir la zona que mejor describe su decisión de compra, ¿cuál sería?